Como avanzar hacia el futuro sin la influencia negativa que pudo dejar el pasado

A veces cuesta trabajo imaginar que podamos tener nuevos propósitos de vida cuando no hemos podido resolver cargas del pasado.  Otras veces sucede que nos proponemos cumplir con nuevas metas pero algo en el camino nos detiene y no avanzamos. La respuesta a estas situaciones apunta a que posiblemente no estamos viviendo debidamente nuestra realidad.  Cargar con culpas y dolores del pasado o trasladarnos mentalmente a soñar con el futuro indica que no estamos en el aquí y el ahora.  Tener metas hacia el futuro es bueno pero siempre y cuando tengan su base en lo que vamos construyendo en el presente.

Ahora, quizá te preguntes como puedes dejar el pasado atrás cuando has hecho varios intentos y no has podido. Quizá lo que te ha faltado sea reconciliarte con tu pasado a través de la aceptación de todo aquello que sucedió en tu vida que ya no puedes cambiar, situaciones que quedaron atrás y que lo mas seguro aún crees que la vida te debe un proceso de justicia por ello.  La justicia en ese sentido, va a empezar y a terminar por ti y en ti.  La justicia la hacemos cuando entendemos que todo tiempo pasado ya quedó atrás pero que nos dejó un aprendizaje de vida, una enseñanza sobre personas o situaciones por las que no queremos pasar otra vez.

Luego de haber aceptado la realidad y lo que ya no se puede cambiar debemos dirigirnos a comprender y también a perdonar lo que sea necesario perdonar.   El perdón es un alivio personal; el perdón te quita un peso del alma además de que te permite recuperar tu vida, haciéndote responsable de ella y así seguir en paz con tu historia

Y entonces, ¿cómo saber si hemos perdonado? porque ya veremos que cambia la manera de contar nuestra historia, ya el pasado lo presentamos de manera constructiva y sin dolor alguno.  Sólo a partir de este punto es que comenzamos a transformar esas experiencias pasadas cargadas de dolor en experiencias por las cuáles estar agradecidos. A partir de aquí aprendemos a disfrutar.

Disfrutar de la vida es ser pro-salud, es entender que sólo tenemos este chance en la tierra para reír, disfrutar los momentos, hacer nuevas amistades, estudiar si así lo queremos, ayudar a los demás, pasarla bien, tener actos de bondad.

No desperdicies tu tiempo en el pasado, mas bien úsalo para amar, crecer, aprender y sobre todo, para volver a sonreír.